Poco conocidos por el público en general y raramente estudiados, los ecosistemas asociados a los suelos de serpentina albergan una biodiversidad única, tanto en términos de flora como de fauna. Un estudio reciente ha investigado la importancia de estos ecosistemas peculiares para la conservación de los insectos en Cuba.

Al igual que sus parientes diurnas, las mariposas nocturnas, comúnmente conocidas como polillas o palomillas, están estrechamente ligadas a la biodiversidad vegetal. Los ambientes con una vegetación particular tienen potencial de albergar especies interesantes de polillas, como es el caso de los suelos serpentínicos. Estos suelos provienen de rocas ultramáficas, ricas en metales tóxicos. Las plantas que habitan en estos suelos han tenido que adaptarse a condiciones extremas, y como resultado, la flora de estos ecosistemas es rica en especies endémicas, es decir, no existen en ningún otro lugar. En Cuba, aunque estos suelos solo representan el 7 % de la superficie de la isla, poseen cerca de una cuarta parte de las plantas endémicas, lo que subraya su importancia para la biodiversidad.

Vegetación creciendo sobre suelos serpentínicos © Claudia Loiz

Dado el número de plantas endémicas que albergan y sabiendo la importancia de la biodiversidad vegetal para los lepidópteros, los ecosistemas serpentínicos probablemente juegan un papel clave en la conservación de estos insectos. Esto es lo que Claudia Loiz, joven investigadora cubana apoyada por la asociación Caribaea Initiative, y sus colegas querían verificar. Juntos llevaron a cabo la primera descripción de los ensamblajes de polillas en estos entornos en Cuba.

Estudiar las polillas sin afectar sus poblaciones

Se utilizan trampas de luz para atraer polillas © Claudia Loiz

El estudio se centró en el grupo de los Arctiinae, una subfamilia de lepidópteros de la que se conocen 101 especies en Cuba, más de la mitad de las cuales son endémicas de la isla.

Para llevar a cabo el estudio, se instalaron trampas de luz simples, compuestas por una lámpara potente dirigida hacia una gran sábana blanca colocada verticalmente en varios puntos de dos sitios serpentínicos de la isla. Las polillas, atraídas por la luz, fueron identificadas y contadas en el sitio sin necesidad de captura. Además, se realizó un inventario de las plantas en cada punto de muestreo para comprender mejor las interacciones entre la diversidad vegetal y la de las mariposas nocturnas.

Resultados que confirman la importancia del ecosistema

Durante el estudio, el equipo identificó 1,369 polillas pertenecientes a 33 especies diferentes. A esta cifra impresionante se suma un dato aún más relevante: más de una cuarta parte de las especies identificadas son endémicas de Cuba, lo que subraya la importancia de estos hábitats específicos.

En cuanto a la vegetación, se identificaron 78 especies de plantas en los dos sitios, de las cuales casi la mitad son endémicas. Los dos sitios presentan características muy distintas. Como era de esperar, el suelo más antiguo y más extenso es también el más rico en vegetación, con 74 especies de plantas registradas, en comparación con 45 en el segundo sitio. El equipo pudo confirmar que la diversidad de los Arctiinae era mayor en la zona más antigua y extensa, ilustrando el vínculo directo entre la riqueza floral y la diversidad de polillas.

Algunas de las especies registradas: Phoenicoprocta capistrata, Pareuchaetes insulata, Eunomia insularis y Correbidia terminalis © Claudia Loiz

Un reto para la conservación

El estudio ofrece nuevos elementos sobre los ensamblajes de polillas Arctiinae en Cuba. En particular, se evidenció que las especies endémicas tienden a ser más escasas que las especies no endémicas, con una menor cantidad de individuos observados.

Lo más destacado de este estudio es que demuestra que, aunque los suelos serpentínicos representan solo una pequeña parte del territorio cubano, albergan una biodiversidad importante tanto en flora como en fauna, con numerosas especies y una alta proporción de endemismo. Estos ecosistemas son de gran interés para la conservación de estas especies y merecen una mayor atención por parte de la comunidad científica.

Sobre la autora

Claudia Loiz, originaria de Cuba, está actualmente realizando un doctorado sobre la diversidad de ensamblajes de mariposas en La Habana, con el apoyo de Caribaea Initiative. Los datos presentados en este artículo provienen de su trabajo de licenciatura y de máster, centrado en la diversidad de los Arctiinae en Cuba, el último también respaldado por Caribaea Initiative.

Referencia

Loiz, C., Perrot-Minnot, M.-J. & Barro, A. (2024). Diversity and endemism of Arctiinae moth assemblages in serpentine dry lowlands in Cuba. Journal of Insect Conservation, https://doi.org/10.1007/s10841-024-00632-w.