En Cuba como en otros lugares, la urbanización está aumentando, afectando a muchas especies animales. En un estudio publicado recientemente, los investigadores estudiaron el comportamiento de una especie endémica de la isla, la lagartija Anolis homolechis, comparando bosques y poblaciones suburbanas.
La urbanización de los entornos se caracteriza por numerosas perturbaciones para la vida silvestre: recursos alimenticios fragmentados, proximidad a los humanos, presencia de contaminantes, un microclima más seco y cálido, etc. Estos cambios son a menudo la causa de una pérdida de biodiversidad. Para sobrevivir en tales entornos, las especies deben poder adaptarse en rápidamente. Las variaciones en su comportamiento pueden desempeñar un papel clave al permitir una respuesta rápida a los cambios ambientales.
Las lagartijas del grupo anolis proporcionan un buen modelo para entender los efectos de la urbanización. Las comparaciones entre poblaciones en entornos urbanos y no urbanos mostraron muchas diferencias, incluso en su comportamiento. Sin embargo, tales comparaciones se han llevado a cabo principalmente en especies invasoras, que probablemente tienen un mayor potencial de adaptación, incluso a través de la flexibilidad en su comportamiento. Para verificar si estos hallazgos también se aplican a las especies no invasoras, la doctora Annabelle Vidal estudió a la lagartija Anolis homolechis, endémica de Cuba.
Se capturaron nada menos que 779 ejemplares, tanto machos como hembras, en dos bosques y dos zonas urbanas de la isla. Para cada captura, el investigador anotó la altura a la que estaba posado el animal, un parámetro que se sabe está influenciado por múltiples factores. Los individuos fueron medidos, pesados y sexados. Además, cerca de 200 individuos fueron marcados con una etiqueta numerada, lo que permitió el reconocimiento a distancia. Gracias a este marcaje, Annabelle Vidal grabó vídeos de 81 individuos para obtener datos de comportamiento más detallados.
En un estudio anterior, el autor ya encontró que la urbanización afecta el tamaño y la condición corporal de esta especie (lea el artículo). Los resultados del presente estudio muestran que también se observa una diferencia en el comportamiento de los anolis que viven en bosques en comparación con los de ambientes suburbanos. De hecho, las lagartijas percharon más alto en entornos urbanos en comparación con los entornos forestales. Esta diferencia podría explicarse por una temperatura general más alta en las áreas urbanas, un parámetro que se sabe que influye en la altura de la percha de los anolis. Las lagartijas en áreas urbanas también podrían beneficiarse de una mejor visibilidad de los alrededores en áreas suburbanas abiertas, en comparación con espacios cerrados, como los bosques.
También se encontró que otros parámetros medidos influyen en la altura de la percha, en particular el tamaño de los individuos. Los análisis mostraron que los individuos más grandes tendían a perchar más alto. A diferencia de otros estudios, no se encontraron diferencias entre machos y hembras. Esto podría deberse al dimorfismo sexual típico en esta especie. De hecho, los machos son en general más grandes que las hembras. Así, aunque los machos perchaban em promedio más alto que las hembras, dicho efecto se debe principalmente a su mayor tamaño. El efecto del tamaño del cuerpo sobre la altura de la percha podría explicarse por una dominancia de los individuos más grandes, o simplemente por su mayor eficiencia para trepar, gracias a las almohadillas de los pies más grandes y las garras más grandes.
Finalmente, el estudio encontró que el comportamiento de las lagartijas difería según la hora del día, pero solo en el entorno urbano: las lagartijas perchaban más alto en la tarde en comparación con la mañana. Los autores explican que el riesgo de depredación podría ser mayor por la tarde en las zonas urbanas, a diferencia de los bosques, lo que provoca esta respuesta conductual.
En conclusión, el estudio muestra que la urbanización influye en el comportamiento de los Anolis. También muestra, como sospechaban los autores, que las especies invasoras y endémicas tienen diferentes respuestas a la urbanización. De hecho, los estudios realizados en A. sagrei y A. cristatellus, dos especies conocidas por su alto potencial invasor, no encontraron diferencias en la altura de percha entre entornos urbanos y no urbanos. Tal diferencia destaca la importancia de estudiar los efectos del cambio ambiental no solo en las especies invasoras generalizadas, sino también en las especies nativas.
Referencia
Vidal, A., Pradel, R. & Cézilly, F. (2023). Do suburban populations of lizards behave differently from forest ones? An analysis of perch height, time budget, and display rate in the Cuban endemic Anolis homolechis. Diversity 15: 261.